La presbiacusia es la pérdida progresiva de la audición en adultos mayores. Está relacionada, principalmente, al natural deterioro del sistema auditivo que tiene lugar durante el proceso de envejecimiento.
La misma comienza a suceder a partir de los 60 años de edad y puede verse intensificada por ciertos factores. A continuación, podrá leer cierta información relevante acerca de este tipo de hipoacusia, sus causas y tratamientos.
¿Por qué una persona puede desarrollar presbiacusia a medida que envejece?
Además del deterioro que experimenta el sistema auditivo (que afecta sobre todo la percepción de frecuencias agudas) y el sistema neurosensorial, hay otras razones que vuelven a las personas mayores propensas a perder la audición paulatinamente.
Puede mencionarse la falta de hábitos saludables (como hacer ejercicio), la alta exposición a ruidos muy fuertes durante períodos prolongados de tiempo, la ingesta de ciertos medicamentos, enfermedades de base como la diabetes, la hipertensión arterial o las infecciones auditivas, traumatismos, factores hereditarios y factores ambientales.
Tratar la presbiacusia a tiempo es indispensable para garantizar una buena calidad de vida a la persona que presenta tal pérdida de la audición y a su círculo cercano. Caso contrario, es usual que los pacientes comiencen a aislarse del mundo que los rodea y que pueda verse intensificada la aparición de otras afecciones, como la demencia y la depresión.
Síntomas de la presbiacusia
Podemos identificar una pérdida progresiva de la audición si:
– La persona comienza a manifestar confusión de palabras, a causa de la disminución de su capacidad auditiva de frecuencias agudas.
– Las voces agudas, principalmente las femeninas, resultan más difíciles de interpretar.
– Las conversaciones grupales se tornan contextos auditivos desafiantes, dada la dificultad de comprensión ante la presencia de varios hablantes en simultáneo, ruidos ambiente o de fondo.
– Hay una mayor sensibilidad hacia sonidos fuertes, sobre todo de tono agudo.
– La persona tiende a elevar el volumen cuando mira televisión o escucha programas de radio.
¿Cómo tratar esta pérdida auditiva?
Si el grado de hipoacusia presente es de tipo leve a moderado, una solución como los audífonos puede ser suficiente para compensar el déficit; ya que estos habilitan la amplificación acústica de los sonidos.
En cambio, cuando los daños se presentan a nivel del oído interno y la pérdida auditiva es de tipo severa a profunda, el tratamiento indicado es el implante auditivo. Este último no solo mejora el desempeño auditivo de la persona usuaria, también contribuye significativamente a su inserción social y su calidad de vida.
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