El 3 de marzo se conmemora el Día Mundial de la Audición, una fecha que busca concienciar sobre la detección temprana y tratamiento para quienes padecen alguna discapacidad auditiva, que se ha acelerado en medio de la pandemia con el aumento en el uso de internet.
El desconocimiento, la falta de atención temprana e, incluso, la ausencia de tamizajes a los más jóvenes, propician el desarrollo de pérdidas auditivas.
La pérdida auditiva en la pandemia de Covid-19
“Es un hecho que la historia se partió en dos con el coronavirus. Hoy estamos usando mucho los audífonos y eso parte de las necesidades actuales. Sin embargo, debemos buscar un equilibrio y no estar 12 horas conectados a los audífonos, hacer pausas activas y descanso auditivo. También es fundamental buscar dispositivos con buenos reductores de ruido, buena calidad de audio y conectividad para cuidar los oídos”, comenta Lina Rubio, soporte clínico de MED-EL en Norte y Centro América.
Según el Informe Mundial sobre la Audición publicado en 2021 por la Organización Mundial de la Salud (OMS), 1 de cada 4 personas vivirá con algún grado de pérdida auditiva en 2050. Actualmente, más de 1.500 millones de personas en todo el mundo viven con pérdida auditiva y más de 1.000 millones de jóvenes corren el riesgo de perder la audición debido a la exposición regular y prolongada a sonidos fuertes.
Los altos niveles de ruido en los lugares de ocio son un factor de riesgo que afecta hasta el 40% de los jóvenes de los países de ingresos altos y medios, por ello se estima que hasta el 50% de las personas corre el riesgo de dañar permanentemente su audición. Sin embargo, la pérdida auditiva inducida por el ruido puede prevenirse adoptando recomendaciones de escucha segura.
Diagnóstico y tratamiento
La importancia de un diagnóstico oportuno garantiza un tratamiento efectivo. El desarrollo tecnológico permite contar hoy con alternativas para tratar diversos tipos de hipoacusia como los audífonos, e implantes auditivos como los implantes cocleares, de oído medio y osteointegrados, que permiten hacer las actividades diarias, incluso hacer ejercicio, ir a la playa y nadar.
Las razones para que surja una hipoacusia o pérdida auditiva van desde enfermedades hereditarias como la otoesclerosis, con mayor prevalencia en mujeres de 30 a 50 años; la presbiacusia, que es el desgaste del órgano auditivo por la edad; hipoxias o falta de oxígeno al momento de nacer; sufrimiento fetal o inmadurez pulmonar; así como la exposición prolongada al ruido y el consumo de medicamentos tóxicos para el oído.
El 50% de la pérdida de audición es prevenible. Un gran número de personas afectadas por pérdida de la audición puede mejorarla con medicamentos, cirugía y el uso de audífonos y otros dispositivos. La sensibilización y el mejoramiento del acceso a servicios de atención primaria pueden ayudar a reducir la prevalencia y los efectos adversos de la pérdida de la audición.
Recomendaciones
- Baja el volumen de los dispositivos de audio 60% por debajo del máximo.
- No te sobreexpongas a música alta. En el caso de los adultos, se recomienda escuchar música hasta los 80 decibeles durante no más de 40 horas a la semana, mientras que a los niños se les aconseja no superar los 75 dBA.
- Protege los oídos de sonidos fuertes. Utiliza tapones para proteger los oídos de los sonidos fuertes en lugares con música amplificada como discotecas, conciertos y locales de ocio. Si se colocan correctamente, los tapones pueden reducir la exposición entre 5 y 45 dB.
- Descansa. Cuando haya entornos ruidosos, realiza descansos regulares en zonas tranquilas y limita el uso diario de dispositivos de audio.
- Reduce el ruido de fondo. Utiliza auriculares con limitación de ruido bien ajustados y baja el volumen de la radio, la televisión o cualquier otra fuente de distracción sonora.
- Mantén la distancia con las fuentes de sonido fuertes. Aléjate de los altavoces para proteger tus oídos.
- Elige dispositivos que regulen automáticamente el volumen, prueba aplicaciones y otras tecnologías.
La OMS recomienda que todos los adultos se sometan a una revisión auditiva cada 5 años a partir de los 50 años y hasta los 64 años. A partir de los 65 años, la audición debe revisarse cada 1-3 años. En la web de Volver a Escuchar podrás realizar una prueba auditiva gratuita de forma online.
Oír también es posible para las personas con pérdida auditiva
El director corporativo de Concienciación y Asuntos Públicos de MED-EL, Patrick D’Haese, declara:
“En MED-EL, nuestra misión es superar la pérdida auditiva como barrera para la comunicación y la calidad de vida. Dado que no podemos revertir la pérdida de audición inducida por el ruido, instamos encarecidamente a todo el mundo a proteger su audición en la medida de lo posible. Nuestras innovaciones pueden ayudar a sustituir el sentido humano de la audición con la ayuda de la tecnología y pueden permitir a las personas recuperar y mantener la necesidad humana básica de comunicarse y participar activamente en la vida”.
