Si eres un profesor/a y sabes que vas a tener alumnos – niños con pérdida auditiva y con implantes cocleares, te damos 10 consejos para ayudarles a comenzar con éxito su curso escolar.

10 recomendaciones para incorporar mejorar a los niños con perdida auditiva a las actividades académicas

1. Acércate al niño/a para que le sea más fácil oír, escuchar y comprender.

La interacción cercana es fundamental, pues muchos de los dotes comunicativos no solo se dan mediante lo verbal sino a través de la expresividad facial y otras gesticulaciones corporales. Los niños con perdida auditiva tienden a ser mucho más susceptibles a la comunicación corporal y esto puede incentivar sus ganas de interactuar con el resto de la clase.

2. Reduce el ruido lo máximo posible (por ejemplo: música, sillas, pasillos, ruido exterior). Una clase silenciosa ayuda a que los niños se concentren. Añadir moqueta, cortinas y tapones de goma en las patas de la silla ayuda mucho a reducir el ruido de fondo.

Existen distintas formas de insonorizar una clase, pero en muchos casos basta simplemente con ponerle algunos soporte de material suave a las patas de las sillas y en acomodar bien los pupitres del salón, para que de esa forma no choquen entre sí.

3. Que solo hable una persona a la vez. Hacer turnos de palabra

No se trata de modificar la estructura de la clase para acomodar a los niños con perdida auditiva sino de establecer un orden para que

4. Sienta al niño cerca del interlocutor principal y lejos del ruido

La planificación de las clases va más allá de como se manejan los chicos con relación a las actividades de la clase. El ordenamiento del espacio es fundamental para evitar problemas y armar una estructura recurrente en la que los niños con perdida auditiva no tengan que

5. Permite asientos flexibles para que puedan moverse durante las diferentes actividades para oír mejor y ver al profesor o a otras personas que hablen.

La rigurosidad en este aspecto es contraproducente. Si el chico se levanta para poder escuchar mejor, no le digas nada a menos que su comportamiento interfiera con los demás chicos.

6. Dirige tu mirada hacia la clase mientras hablas para que puedan leerte los labios, ver las expresiones faciales y proporcionar la mejor señal posible de audición.

7. Da pistas visuales (por ejemplo, escribe palabras clave o los deberes en la pizarra, usa gestos naturales y facilita fotos que ayuden a comprender lo que estás explicando).

Es muy recomendable que las clases con niños con perdida auditiva utilicen todos los componentes visuales que les puedan servir. Presentaciones de PowerPoint, cartulinas, proyecciones en video y todos los elementos escritos que puedan ser dejados sobre el tablero van a ayudar al chico de sobremanera.

8. Consigue primero llamar su atención.

Esto no significa que saltes o que tengas que tocarlo, pero si que tu posición en el aula sea lo más cercana al alumno sin que este se sienta increpado.

9. Comprueba que comprenden haciendo preguntas abiertas (como, por ejemplo: ¿Qué haréis a continuación?)

10. Un uso apropiado durante el día del Sistema FM o Sistema de Sonido de Campo para que el niño/a pueda oír su voz claramente (si hay un sistema disponible)

Estos son solo algunos consejos con respecto al trabajo en el aula, pero en realidad cada maestro va a saber qué es lo mejor para cada tipo de alumno con su respectiva condición. Si quieres saber más sobre cómo trabajamos en Volver a Escuchar y las prácticas sociales que desarrollamos para combatir la sordera y ayudar a los pacientes que la padecen, te invitamos a visitar nuestro sitio web.