La rehabilitación auditiva es un proceso esencial para pacientes implantados con soluciones auditivas, personas que han experimentado pérdida auditiva, ya sea debido a factores congénitos, enfermedades, exposición a ruidos fuertes o la edad.
Este proceso tiene por objetivo rehabilitar la capacidad auditiva, desarrollar habilidades auditivas y de lenguaje, mejorar la comunicación y la calidad de vida de los individuos afectados.
Conozcamos en detalle cómo funciona la rehabilitación auditiva durante los primeros años de los niños y por qué es tan importante.
¿Qué es la Rehabilitación Auditiva?
La rehabilitación auditiva es una práctica que se lleva a cabo día tras día, no es una solución inmediata y por eso es necesario hacer un seguimiento. En el caso de los más pequeños, es muy importante la presencia de la familia en sus sesiones.
Esta es una práctica centrada en la familia en la que -junto a la tecnología adecuada para cada caso- se les enseña a los padres y familiares una serie de técnicas y estrategias dentro de las sesiones de terapia en la que ellos participan activamente.
Los padres aprenden a incentivar la conciencia auditiva en sus hijos de oír, primeramente, para después escuchar, así como el desarrollo del habla y el lenguaje siguiendo los hitos del desarrollo infantil.
Las sesiones de terapia auditiva por lo general, se dan una o dos veces por semana, por lo que es de suma importancia que los padres aprendan a transferir los objetivos planteados junto con sus rehabilitadores, a la vida diaria de manera natural.
El lenguaje se adquiere en el día a día y a través de experiencias significativas. Se establece que el 95% del lenguaje infantil es incidental, es el tipo del lenguaje que escuchan a su alrededor y en sus entornos de vida. Posteriormente, se van adquiriendo vocabularios particulares y específicos en la vida escolar. El niño necesita aprender a escuchar para desarrollar habla y lenguaje lo que le permitirá, además de la comunicación, adquirir el segundo gran código de comunicación que es la literacidad.
Paralelamente a la parte auditiva, se trabajan aspectos cognitivos, lingüísticos, metacognitivos, de teoría de la mente y funciones ejecutivas, pues la rehabilitación tiene que basarse en un “todo” del desarrollo integral del niño..
Técnicas para la rehabilitación auditiva
Primeramente, es necesaria la adaptación de tecnología auditiva que le permita al niño oír, para luego aprender a escuchar. Hoy en día los menores con pérdidas auditivas de severas a profundas, pueden beneficiarse de la tecnología de los implantes cocleares, como los MED-El, que son una tecnología de punta. Asimismo, asegurarse que están en buenas condiciones y utilizarlos de 10 a 12 horas diarias, o todo el tiempo en el que el menor se encuentre en vigilia (excepto para bañarse), pero incluso podrán utilizarlos en natación con un funda preparada para las actividades acuáticas..
Se requiere de la participación activa y constante de padres y familiares para estimular al menor en su vida diaria y de manera natural, con base en las sugerencias que reciben semanalmente en las sesiones de rehabilitación. Transferir lo visto en las sesiones a su día a día es fundamental, no duplicar y repetir la sesión en casa, para evaluar nuevas actividades relacionadas a un entorno diferente al de la terapia.
En la Rehabilitación Auditiva no se utiliza la lectura de labios como una herramienta de aprendizaje, pues el niño se basaría visualmente en tratar de comprender el lenguaje y no en aprender a escuchar de manera natural. Las personas que utilizan la lectura de labios para comprender el lenguaje, pierden mucho de lo que se dice, ya que muchos fonemas se producen en la cavidad posterior del aparato fonoarticulador, 33% de los fonemas, visualmente son muy parecidos (visemas) y se confunden, no pueden ver la entonación de lo que se dice (suprasegmentos), por lo que sus voces también son muy particulares y no son naturales, ya que no han aprendido a escucharse ellos mismos, así como a los demás.
También, no pueden comprender al hablante si no lo están viendo y si éste no está a una distancia pertinente. Si desconocen el contexto de lo que se está conversando, presentan dificultades y, por otro lado, comprenden solo a la persona que están viendo.
El corpus básico de esta terapia es el trabajo auditivo a través de muchas estrategias que lo facilitan y por ende, se desarrolla el lenguaje natural, que el niño escucha.
Asimismo, para que la Rehabilitación Auditiva sea exitosa, se requiere de un profesional capacitado en esta área y no solo que haya tomado unos cuantos cursos. Si no está certificado, al menos que cuenten con un mentor que sí lo esté, lo dirija y le ayude a adquirir la práctica adecuada y necesaria.
Ya desde hace tiempo, los niños sordos e hipoacúsicos pueden aprender a escuchar y hablar, para lograr alcanzar lo que deseen hacer, es importante hacer foco en la comunicación con los demás, lo que les permite sentirse más incluidos en una sociedad de oyentes.
La terapia de habla y lenguaje es fundamental en la rehabilitación auditiva. Esta terapia trabaja en mejorar las habilidades verbales del paciente, incluyendo pronunciación, fluidez y la capacidad de leer los labios.
Al proporcionar herramientas y estrategias adecuadas, la rehabilitación auditiva busca permitir a los pacientes llevar una vida más conectada y participativa, mejorando significativamente su calidad de vida.
Para aquellos que buscan más información sobre la rehabilitación auditiva y cómo puede mejorar la calidad de vida, en Volver a Escuchar ofrecemos información valiosa y testimonios emocionantes para individuos y familias que estén enfrentando desafíos auditivos.
